Directos al pulmón

El paso del tiempo cuenta en contra de las personas que padecen un cáncer de pulmón. La alta incidencia de este tumor en León, que está por encima de la media Europea y la tercera más alta de España, hace necesaria una actuación rápida que no dé tregua al avance de la enfermedad. El jefe del servicio de Neumología del Hospital de León, Florentino Díez Fernández, diseña un protocolo para poner en marcha un nuevo servicio de colaboración entre el médico de Atención Primaria y el especialista del Hospital. La idea es que ante la sospecha de un cáncer de pulmón u otra patología, el médico de familia podrá llamar a un teléfono de contacto con el neumólogo para enviarle por medios digitales la radiografía y comentar la historia clínica del paciente, en caso de una sospecha de cáncer y otras patologías que precisen soluciones rápidas. «Estudiaremos los casos sospechosos. El paciente entrará en el circuito que permitirá un diagnóstico rápido en un periodo no superior a los diez días». Escáner, broncoscopias, estudio de muestras y un diagnóstico de certeza son fundamentales para iniciar cuanto antes el tratamiento que permita luchar contra la enfermedad.

«La atención precoz del proceso es muy importante», insiste el jefe de Neumología, Florentino Díez. «Esta vía directa de alarma entre el médico de cabecera y Neumología del Hospital es para las sospechas de cáncer», asegura. Un proceso que reduciría hasta tres meses el diagnóstico definitivo.

«El médico de cabecera tiene como arma la historia clínica del paciente, los síntomas y una radiografía de tórax. Cualquier lesión sospechosa puede ser motivo de consulta. Así se acortarán muchos tiempos. Si es necesario poner en marcha el protocolo para el estudio rápido se hace de manera inmediata. El hecho de entrar en este circuito no significa que se confirme un diagnóstico de cáncer u otras patologías que precisen soluciones rápidas. Estudiaremos los casos sospechosos».

Las radiografías, por sí solas, no son un método diagnóstico. «Una imagen no diagnostica nada. Se puede intuir una lesión, pero siempre hay que comprobarlo con un estudio de biopsia o citología. La imagen da una sospecha diagnóstica».

El equipo multidisciplinar del Hospital de León cuenta con dos neumólogos dedicados a las consultas externas de diagnóstico rápido y una unidad de broncoscopia de diagnostico avanzada de apoyo formada por una radióloga de tórax, oncóloga médica, patológa, radioterapeuta especializada y un radiólogo. Este equipo se reúne todos los martes para comentar los nuevos casos y decidir el itinerario y tratamiento. También cuenta con el apoyo del servicio de cirugía torácica de Salamanca, que se encuentra en contacto por videoconferencia una vez a la semana y en sesión presencial una vez al mes.

«Consideramos que el manejo del cáncer debe estar siempre en manos de un equipo multidisciplinar y no de una única persona. Los equipos ofrecen garantías y muchas ventajas para exponer los distintos puntos de vista de cada especialista, con todos los conocimientos de los avances que ha habido en el desarrollo de las técnicas en los últimos diez años».

Los especialistas utilizan los avances tecnológicos, el diagnóstico y las nuevas terapias farmacológicas para reducir la mortalidad cuando el cáncer ya ha aparecido, aunque la mejor manera de evitar una muerte es prevenir la aparición del tumor. Los neumólogos luchan aquí con un potente enemigo: el tabaco. «Se sabe, desde siempre, que el tabaquismo es lo que marca la tendencia. Se sabe que la política más costoefectiva que puede aplicar un Gobierno para reducir la mortalidad por cáncer de pulmón es evitar el consumo del tabaco», asegura Díez.

Pero los resultados de las campañas llegan con cuentagotas. León es la tercera Comunidad —por detrás de Asturias y Galicia— con más casos de cáncer de pulmón. En el área sanitaria de León se diagnostican 222 tumores al año (188 en varones y 34 en mujeres). La incidencia del cáncer en Europa es de 48 casos por 100.000 habitantes mientras que en León es de 68 por 100.000. «No sabemos por qué se produce esta diferencia. Puede ser que haya más causas ambientales o porque detectamos antes los tumores. También hay que tener en cuenta que los países nórdicos empezaron mucho antes que nosotros con el trabajo en contra del tabaquismo y el cese del hábito del tabaco. Las campañas en España funcionan un poco, pero no todo lo que quisiéramos».

La respuesta para luchar contra un cáncer no es fácil. «La supervivencia global es baja aunque todo depende del momento en el que se diagnostique la enfermedad y el tipo de células que tenga el tumor».

El diagnóstico exacto y el tratamiento más efectivo se consigue con análisis que permitan conocer el tipo de células del tumor. No todos los tumores son iguales ni se detectan en el mismo estadío.

«Ha habido muchos cambios en el estudio diagnóstico y manejo de muestras del cáncer de pulmón. Los estudios genéticos nos ayudan a clasificar el tipo de células que tienen las lesiones cancerosas y ofrecer tratamientos diana concretos», asegura Díez. Conocer el tipo de células que afectan al paciente permite al oncólogo prescribir un tratamiento personalizado en cada paciente adecuándolos según el tipo de tumor, el estadío y los resultados de los marcadores genéticos, con quimioterapia o cirugía selecta en cada caso.. «Ya no damos la quimioterapia global a todo el mundo como hace quince años, que tenía tantos efectos secundarios. Los tratamientos son dirigidos, aunque no es posible siempre con todos los pacientes».

O se cura o mata. El cáncer de pulmón no admite cronificación. La supervivencia global a los cinco años es del 15% pero si se detecta en estadíos precoces puede alcanzar hasta el 70%. «Muchos tumores llegan a las consultas en fases muy avanzadas. Si se sobrevive cinco años se puede considera que el paciente está curado». El diagnóstico precoz es difícil. «Los estudios que se han hecho para estudiar a población aparentemente sana con factores de riesgo no han conseguido disminuir la mortalidad por cáncer, por lo que es muy costoso y poco efectivo. Lo que funciona es que cada caso co pueda ser diagnosticado precozmente si los médicos sospechan que el paciente que tienen en su consulta puede sufrir un tumor».

 

Fuente: http://www.diariodeleon.es